miércoles, 2 de junio de 2010

"Sin miedo a mirar atrás"


Hoy miro atrás y veo todo lo que fui y todo lo que viví.
Y aunque veo sufrimientos y miedo, también veo ternura y fantasía.
Es en la inocencia en que encuentro mi verdad, mi yo con miedo de
dejar de ser yo, mi niño original.
Vi en esa carita mil promesas, que hoy se hicieron realidad en la
voluntad de Dios, y un mundo que cambio cuando cambie yo.
En esos ojos soñadores veo un espejo, siendo algo que una vez fue
ficción, hoy soy realidad.

Millones de emociones y sentimientos cruzando ferozmente en mi
mente y mi corazón, esculpiendo con vida mi propia vida.
Un angelito que miro al cielo parece ser el recuerdo de este viejo
demonio, pero que dentro de si, aun permanece puro; niño.
Amor y odio marcaron este cuerpo y este espíritu, pero con errores
y fracasos, no dejo de estar orgulloso y agradecido de lo que soy.
Con cosas por haber dicho, creo que dije las más importantes.
Con cosas por haber hecho, las que hice me hicieron lo que soy.
En este presente lamentarse o quedarse en el pasado no son una
opción. Mas que eso son una lección, y de esa forma prefiero tomarlo.

Soy joven, así me veo y así me siento. Y con la poca o mucha vida
que he recorrido, he aprendido a rescatar lo mejor del pasado y
dejar lo amargo detrás mio. Pues no tiene sentido alguno sufrir por
lo que no fue, y dejar pasar por delante todo lo que puede ser.
Creo que siempre tendré un poco de miedo por lo que viene o vendrá.
Pero también creo que eso es bueno. Pues es justo ese sentimiento o
sensación la que me recuerda que aun soy un niño, que aun por
dentro no he perdido mi esencia.

No se qué es lo que me prepara la vida y el destino con certeza, nadie
lo sabe. Pero si de algo quiero estar seguro, es que de acá a 25 años mas,
pueda mirar para atrás y sentirme de la misma forma. Que los errores
eran necesarios y que se aprendió la dura lección. Que puedo mirar
atrás sin tener vergüenza de mi mismo. Y lo más importante, que aun
tengo un pequeño temor o intriga por lo que se viene; ya que eso me
seguirá diciendo lo que quiero escuchar... que muy dentro de mi,
aun sigo siendo un niño.

"Dejen que los niños vengan a mi, pues de ellos es el reino de los cielos."

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